Hay un país en el mundo - Pedro Julio Mir Valentín

  Hay un país en el mundo - Pedro Julio Mir Valentín

                                            Biografia de Pedro Mir

Pedro Julio Mir Valentín (San Pedro de Macorís3 de junio de 1913-Santo Domingo11 de julio del 2000) fue un escritor dominicano perteneciente a la generación de los Independientes del 40, declarado Poeta Nacional de la República Dominicana por el Congreso Nacional en 1984. Se le conoce como uno de los poetas dominicanos más destacados. Hay una escuela pública con su nombre

sus inicios

A principios de la década de 1930, Pedro Mir empieza a escribir sus primeros poemas, mostrándolos a amigos y relacionados. Uno de esos amigos decide sin consultarle, llevar unos versos al escritor Juan Bosch, quien ya en ese entonces era una figura literaria importante en el ámbito dominicano. La fibra poética natural del autor llama la atención de Juan Bosch, pero éste desestima los versos diciendo que el poeta tiene talento pero debería "dirigir los ojos a su tierra". Enterado Pedro Mir, decide escribir sus primeros poemas de corte social y esta vez enviárselos a Juan Bosch él mismo. Bosch no contesta, sino que publica los versos en su sección del Listín Diario, un importante periódico dominicano, con el llamativo título que luego sería una profecía: ¿Será este muchacho el esperado poeta social dominicano?

muerte

Pedro Mir murió a los 87 años el 11 de julio del año 2000, de una larga y fuerte dolencia pulmonar en Santo Domingo, rodeado de su familia. En su honor la Universidad Autónoma De Santo Domingo, UASD fundó la Biblioteca Pedro Mir.

Hay un país en el mundo


Hay un país en el mundo
colocado en el mismo trayecto del sol.
Oriundo de la noche. 
Colocado
en un inverosímil archipiélago
de azúcar y de alcohol. 

Sencillamente 
liviano, 
como un ala de murciélago 
apoyado en la brisa. 

Sencillamente 
claro, 
como el rastro del beso en las solteronas antiguas 
o el día en los tejados. 

Sencillamente 
frutal. Fluvial. Y material. Y sin embargo 
sencillamente tórrido y pateado 
como una adolescente en las caderas. 

Sencillamente triste y oprimido. 

Sencillamente agreste y despoblado 

En verdad. 
Con tres millones 
suma de la vida 
y entre tanto 
cuatro cordilleras cardinales 
y una inmensa bahía y otra inmensa bahía, 
tres penínsulas con islas adyacentes 
y un asombro de ríos verticales 
y tierra bajo los árboles y tierra 
bajo los ríos y en la falda del monte 
y al pie de la colina y detrás del horizonte 
y tierra desde el canto de los gallos 
y tierra bajo el galope de los caballos 
y tierra sobre el día, bajo el mapa, alrededor 
y debajo de todas las huellas y en medio del amor. 

Entonces 
es lo que he declarado. 

Hay
un país en el mundo
 sencillamente agreste y despoblado. 
Algún amor creerá 
que en este fluvial país en que la tierra brota, 
y se derrama y cruje como una vena rota, 
donde el día tiene su triunfo verdadero, 
irán los campesinos con asombro y apero 
a cultivar 
cantando 
su franja propietaria. 

Este amor 
quebrará su inocencia solitaria. 
Pero no. 

Y creerá que en medio de esta tierra recrecida, 
donde quiera, donde ruedan montañas por los valles 
como frescas monedas azules, donde duerme 
un bosque en cada flor y en cada flor la vida, 
irán los campesinos por la loma dormida 
a gozar 
forcejeando 
con su propia cosecha. 

Este amor 
doblará su luminosa flecha. 
Pero no. 
Y creerá 
de donde el viento asalta el íntimo terrón 
y lo convierte en tropas de cumbres y praderas, 
donde cada colina parece un corazón, 
en cada campesino irán las primaveras cantando 
entre los surcos
su propiedad. 

Este amor 
alcanzará su floreciente edad. 
Pero no. 

Hay 
un país en el mundo 
donde un campesino breve, 
seco y agrio 
muere y muerde 
descalzo su polvo derruido, 
y la tierra no alcanza para su bronca muerte.
 
¡Oídlo bien! No alcanza para quedar dormido. 
Es un país pequeño y agredido. Sencillamente triste, 
triste y torvo, triste y acre. Ya lo dije: 
sencillamente triste y oprimido. 

Procedente del fondo de la noche 
vengo a hablar de un país. 
Precisamente 
pobre de población. 
Pero no es eso solamente. 
Natural de la noche soy producto de un viaje. 
Dadme tiempo
coraje
para hacer la canción. 

Plumón de nido nivel de luna
salud del oro guitarra abierta 
final de viaje donde una isla 
los campesinos no tienen tierra. 

Decid al viento los apellidos 
de los ladrones y las cavernas 
y abrid los ojos donde un desastre 
los campesinos no tienen tierra. 

El aire brusco de un breve puño 
que se detiene junto a una piedra 
abre una herida donde unos ojos 
los campesinos no tienen tierra. 

Los que la roban no tienen ángeles 
no tienen órbita entre las piernas 
no tienen sexo donde una patria 
los campesinos no tienen tierra. 

No tienen paz entre las pestañas 
no tienen tierra no tienen tierra.

 1 Hay un país en el mundo (poema gris en varias ocasiones) / Pedro Mir, 1913-2000. Santo Domingo : Comisión Permanente de la Feria del Libro, 1999. 

Opinión de la obra

Lo primero que noto es que el escribe desde dos posturas, que son las que hay hoy en día, y es que la primera descripción es como lo hacen las guías de viajes, mostrándote el lado bueno de las cosas. sin embargo el también lo hace desde el otro lado de la moneda, mostrándote los fallos que tenia o tienen nuestro pías en el mundo de una manera poética. pero al final lo veo de una forma protestante, quería enviar un mensaje como muchos de los poetas dominicanos y es que, en si, en este paisa hay de todo pero a la vez nosotros no tenemos nada.

¡HAY UN PAIS EN EL MUNDO!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Andamio para la escritura: Metodo de adquisicion lexical (PAL)

La palabra y su estructura: adquisición lexica

RECUPERACIÓN DEL SABER: Uso y Diversidad lingüística